Hacía mucho tiempo que os quería enseñar mi rutina facial nocturna. He pensado que era buena idea hacer un vídeo, así podéis ver cómo uso los productos y qué pasos sigo.

Una rutina facial nocturna nos llevará siempre un poquito más de tiempo que la matinal, pero no tiene porque llevarnos más de diez minutos. Uséis los productos que uséis, mi recomendación es que sean los que mejor os vayan y se adapten a vuestra piel y a vuestro estilo de vida. Si no tenéis tiempo, en lugar de usar un limpiador con muselina, podéis usar un gel, por ejemplo. O si vuestra piel está perfecta no hace falta que uséis un tónico.

Si queréis saber mi tipo de piel, os lo explico todo en el apartado «Sobre mí«.

Como ya os he explicado muchas veces, lo más importante en una rutina nocturna es el sistema de la doble limpieza. Os hayáis maquillado o no, la piel va reteniendo suciedad del sudor y la polución. Por ello el primer paso siempre será retirar esa suciedad.

Lo más cómodo y rápido que existe es el agua micelar. Mi favorita es la Sensibio H2O de Bioderma, pero hay miles en el mercado. Si habéis usado productos waterproof será mejor que para los ojos uséis una solución bifásica. Empapamos un algodón, lo presionamos suavemente sobre el ojo y arrastramos con cuidado hacia abajo. Hacemos lo mismo con los labios y luego seguimos con toda la cara. Es importante hacer cuantas pasadas sean necesarias hasta que el último algodón que uséis salga limpio.

El segundo paso es limpiar en profundidad. Ya sabéis que soy la loca de los limpiadores faciales. Ahora mismo mi favorito es el Cleanse & Polish Hot Cloth Cleanser de Liz Earle. Su textura y su olor me relajan, y el producto, junto con la muselina, me limpian muy bien y me dejan la piel muy suave. Con un sólo pump es suficiente para todo el rostro, incluidos los ojos. Lo repartimos bien y masajeamos. Empapamos la muselina en agua tibia o caliente y la presionamos sobre el rostro. Después vamos limpiando, retirando el producto.

El tercer paso es el tónico. Como os digo en el vídeo hasta hace poco no usaba tónicos. Una mala experiencia hizo que no quisiera verlos ni en pintura. Pero después de descubrir que podía usar el Agua de Belleza de Caudalie como tónico, y de probar el de Pixi, me declaro fan incondicional. El tónico ayuda a sellar el poro y calmar la piel.

Lo siguiente es el sérum o aceite. Como sabéis, las cremas faciales puede ser un poco más genéricas, pero los sérums ayudan a corregir o tratar condiciones específicas: sequedad, deshidratación, despigmentación, piel irritada, piel apagada o fatigada, etc. Desde hace un año más o menos utilizo el Aceite Destoxificante de noche de Caudalie, que es un aceite seco que ayuda a regenerar e iluminar las pieles apagadas. Lo suelo usar dos o tres noches a la semana y muchas veces ni siquiera uso crema después. Me parece increíble que todavía no le haya dedicado un post!

Antes de la crema hay que usar contorno de ojos. Mis ojos son bastante sensibles, tengo bolsas y retengo líquidos como una camella embarazada. Así que mi principal preocupación es que el contorno calme, descongestione e hidrate. Este Upgrade Lipo Lifting Eyecream de Sensilis no está haciendo esa función pero lo tengo que acabar.

Y por último, la crema. Desde Crea-M cosmetics me mandaron la Skin Brightening para que la probara (gracias!!!!!). Leí una review bastante positiva en el blog de Marikowskaya y tenía muchas ganas de probarla.  Pensaba que sería más densa. De hecho me habían asustado un poco al explicarme la textura, pero de momento a mi me está resultando muy cómoda de aplicar. Es verdad que es un poco más densa que las cremas que suelo usar, pero no tengo queja. Cuando lleve más tiempo usándola os hago una review más en profundidad.

Aquí os dejo el vídeo 🙂

Espero que os guste el vídeo y el post!! Muchísimas gracias por todo vuestro apoyo, me habéis dado fuerzas e ilusión para seguir haciendo vídeos. Si tenéis alguna petición no dudéis en dejarla en los comentarios. Pronto habrá sorpresitas!!